Descubre cómo construir un hogar de paz y amor

 ¿Sabes cómo construir un hogar de paz y amor? ¿Sabes qué dice la Biblia acerca del matrimonio? ¿Cómo deben ser los esposo con sus esposas? ¿Qué deben practicar las esposas? Si quieres profundizar en este tema te invito a leer la cápsula divina de hoy. 💊

18  Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.

 19  Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas.

Colosenses 3:18-19 [RV60]

 En este pasaje, el apóstol Pablo nos muestra la forma en que deben relacionarse los esposos y las esposas dentro del matrimonio, además explica cómo se extiende este orden en el hogar en general. 

Donde está el orden de Dios, hay armonía

Cuando Pablo dice: "Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor", no está hablando de inferioridad, sino de orden y respeto. Se refiere a la sujección, no habla de esclavitud, sino de un reconocimiento del liderazgo que Dios ha establecido en el hogar. Una esposa que se sujeta a su esposo lo hace "como conviene en el Señor", es decir, lo hacer para honrar a Cristo.

Deberes del marido

A los maridos se les ordena: "amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas". Esto significa que el liderazgo del hombre no es autoritario ni violento, sino amoroso, siguiendo el ejemplo de Cristo, que amó a la iglesia de tal manera, que hasta dio su vida por ella. Cuando un esposo ama de esa manera, la esposa se siente segura de su liderazgo y se siente confiada.

Dios desea que la relación matrimonial sea un reflejo de la relación entre Cristo y la iglesia, esto es, en amor, respeto mutuo y unidad. Si esto se cumple, los hijos también aprenden el valor de la obediencia y el respeto. Si lees el versículo 20, encuentras: "Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor".

¿Se logra la armonía en el hogar con fuerzas humanas?

No, la verdadera armonía en el matrimonio y en la familia no se logra con fuerzas humanas, sino con Cristo en el centro. Si el esposo ama a su esposa como Cristo ama, y la esposa respeta a su esposo como la iglesia a Cristo, entonces el hogar se convierte en un lugar de paz, unidad y bendición.