Ira y enojo: ¿Con qué frecuencia te enojas?

 

¿Sabes qué consecuencias trae la ira y el enojo? ¿Sueles enojarte con mucha frecuencia? Si es así, es importante que profundices en la cápsula divina 

de hoy. Aunque muchas personas saben que enojarse les afecta y perjudica su vida emocional y espiritual, no le dan importancia hasta que no ven los resultados en su vida. Son muchos los textos bíblicos que nos hablan acerca de la ira y el enojo, por ejemplo, lee lo que nos dice Salmos 37:8:

Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo.

Enseñanza: ¿Qué nos habla Dios hoy?

¿Qué es la ira? Es un sentimiento de indignación que provoca enojo, furia, rabia, cólera, furor o irritación. Se manifiesta de forma repentina. 

¿Qué es el enojo? Es un sentimiento que puede variar de intensidad desde una irritación leve o hasta la furia. Tanto la ira como el enojo son emociones que se relacionan entre sí. 

¿Te enojas o airas frecuentemente? Si es así, debes tener en cuenta que la ira puede provocar problemas en las relaciones con tus amigos, familiares y con la sociedad en general. Estas emociones se convierten en un problema intenso cuando se deja entrar y no haces nada por evitarla. 

¿Qué puede causar la ira? 

La ira puede ser causada por sucesos externos o internos, estos sucesos pueden ser por:

• Una persona específica, como un compañero de clases, trabajo o jefe.
• Algo ocurrido, como un vuelo cancelado o un cierre de las vías de tránsito.
• Preocupación por problemas personales.
• Recuerdos de hechos traumáticos o enfurecedores. 
• Toma de malas decisiones. 

Salmos 37:8, nos enseña que no está bien dejar que la ira y el enojo nos dominen, debemos alejarnos de estas emociones negativas, ya que pueden llevarnos a cometer acciones pecaminosas afectando directamente nuestra vida espiritual, emocional y física. 

La ira y el enojo son emociones humanas, que de no ser controladas, pueden conducirte a actuar de manera contraria a la voluntad de Dios. Si no puedes controlar el enojo y la ira, debes acercarte a Dios y pedirle que te ayude a manejar tus emociones.

¿Te puede empujar la ira o enojo a hacer lo malo?

Sí, la ira te puede empujar a hacer lo malo, y no solo eso, la ira puede hacer que tomes decisiones impulsivas que perjudiquen tu relación con Dios y con los demás. 

Consecuencias negativas que puedes tener a causa de la ira y el enojo

Si no controlas la ira y el enojo puedes tener consecuencias en diferentes aspectos de tu vida. A continuación, aquí tienes alguna de ellas:

Espirituales

La ira y el enojo afecta tu relación con Dios, estas emociones pueden llevarte a tomar acciones pecaminosas como la venganza, el odio o la falta de perdón, lo que terminará alejándote de los principios de Dios. 

Además, sentirás que te faltará la paz interior, la ira y el enojo te alejan de la paz que Dios desea que tengas, tal como nos enseña Filipenses 4:7 

Y la paz de Dios. que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.

Emocionales

La ira prolongada puede causar estrés y tensiones emocionales, lo que generará un estado constante de malestar. Además, sentirás que perderás el control, lo que puede hacer que actúes impulsivamente, tomando decisiones que después puedes lamentar.

Físicas

La ira crónica puede ocasionar presión arterial alta, enfermedades cardíacas, problemas estomacales y dolores de cabeza. 

También produce fatiga y desgaste, ya que al mantenerte enojado tu cuerpo consume energía lo que perjudica el bienestar físico. 

Sociales

La ira y el enojo puede ocasionar conflictos interpersonales que afectan las relaciones con amigos, familiares o compañeros de trabajo. Además, si constantemente reaccionas con enojo, los demás pueden evitar relacionarse contigo.

Legales o prácticas

Al estar influenciado por la ira, lo más probable es que puedas cometer errores como agresiones o malas decisiones. También podrías perder muy buenas oportunidades en el ámbito profesional o personal.

Nota: ¿Crees que eres una persona que se enoja constantemente? Si tu respuesta es afirmativa, hoy Dios te invita a cultivar un carácter pacífico, entrega tus preocupaciones y frustracciones a Dios, así evitarás que estas emociones te dominen.

Este Salmo nos invita a confiar en el Señor y a esperar pacientemente en Él, quien es justo y su fidelidad es infinita. 

Si quieres dejar tu opinión acerca de la ira y el enojo escríbenos tus comentarios acerca de lo que crees y si has podido manejar tus emociones, tal vez puedas ayudar a otros.

¡Dios te bendiga!