Descubre por qué no prosperas y no tienes salud

¿Sabes por qué no prosperas y no tienes salud? ¿Sabías que Dios quiere que vivas una vida plena y de bienestar? ¿Sabías que Dios quiere que seas prosperado en todo así como prospera tu alma? ¿Crees que vives una vida llena de la gracia de Dios? Si quieres profundizar en este tema te invito a leer la cápsula divina de hoy. 

2  Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.

3 Juan 1:2 [RV60]

En este versículo el apóstol Juan escribe esta carta a Gayo, un creyente hospitalario y fiel. En este saludo expresa de manera profunda el deseo de Dios para sus hijos, esto es tener una vida en equilibrio, donde el bienestar del alma se refleje también en la salud física y la prosperidad externa. Esto nos revela una verdad poderosa. 

Es decir, Dios no separa lo espiritual de lo cotidiano, esto porque quiere que vivamos en plenitud en todas las áreas. 

¿A qué se refiere la prosperidad del alma?

Cuando el apóstol Juan hace referencia a la prosperidad del alma hace énfasis en tener una relación sólida con Dios, tener una conciencia limpia y en paz, tener una vida guiada por el Espíritu y no por las emociones, y por supuesto, que el fruto del Espíritu que es amor, gozo, paz, benignidad y paciencia se refleje en ti.

Un alma que próspera tiene una identidad firme en Cristo y vive desde la verdad de Dios, no desde el temor y la ansiedad. Es una persona que aún en medio de las dificultades, está confiando que Dios le librará de todo mal. 

Prosperidad en todas las cosas

Juan desea que Gayo sea prosperado en todas las cosas, esto va desde aspectos financieros hasta emocionales. En lo financiero que tengas todas las cosas y lo necesario para bendecir más y más a otras personas.

Desde el punto de vista emocional que tengas estabilidad, alegría y contentamiento. En cuanto a las relaciones personales, que sean relaciones sanas, armoniosas y edificantes. Y vocacionalmente que cumplas con el propósito que Dios ha puesto en tus manos. Dios no está lejos de tus necesidades diarias, Él quiere verte avanzar, crecer y florecer.

Bienestar físico

Además de prosperar en todas las cosas, Juan también menciona acerca de la salud corporal, lo que es muy importante. Como todos sabemos el bienestar físico es parte del cuidado integral que Dios desea para nosotros. Esto significa que un cuerpo sano permite servir con mayor energía y libertad. 

Lo que implica tener una responsabilidad personal, y cuidar lo que comemos, descansar, hacer ejercicio y mantener un estilo de vida saludable como un acto de cuidado espiritual. 

El alma refleja todo lo demás

Juan señala "así como prospera tu alma" lo que implica una verdad espiritual profunda, esto indica que el impacto del alma impacta todas las áreas. 

Si tu alma está herida, estancada, confundida y sin sanar, es difícil que experimentes la paz de Dios. Es por ello que Dios trabaja desde otras dimensiones y lo hace desde adentro hacia afuera.

Si prospera tu fe, prospera tu perspectiva, si prosperan tu corazón, prosperan tus decisiones y si prospera tu comunión con Dios también prospera tu entendimiento del próposito. 

No te conformes con crecer espiritualmente solamente, también debes cuidar tu salud espiritual y emocional.  Y tampoco te centres solo en lo material sin atender tu interior. La verdadera bendición es integral, continua y abundante. 

Si esta cápsula fue de bendición para tu vida no olvides compartir, será de gran bendición para otras personas. 😊