¿Amas a Dios? A veces pensamos que solo por ir a la iglesia y decir ser seguidor de Jesucristo es todo, pero ¿hasta dónde se cumple lo que predicamos? Este sentimiento de amor a nuestro Dios va más allá de lo que imaginamos, es tan fuerte que nos llena de gozo y paz que el mundo no puede dar.
Tal vez necesites revisar muy bien si verdaderamente amas a Dios por lo que Él hace por ti o por lo que Él es realmente.
Una vida llena del amor de Dios es lo que todo el mundo anhela, sin embargo, la maldad se ha multiplicado y al hombre le cuesta tanto entender este principio de amor dejando de lado lo que más importa que es el vivir en paz primeramente con Dios y después con los hombres. Cuando logramos entender que lo primero es buscar las cosas de arriba donde está Cristo sentado se afirma en nuestra vida un cambio y nos gustaría vivir una vida en santidad.
Es importante recordar que Jesús desea lo mejor para nosotros, Él vino a darnos vida y vida en abundancia a fin de que todos procedamos al arrepentimiento, y que podamos ser personas que testifican verdaderamente su amor.
Una vida llena del amor de Dios es lo que todo el mundo anhela, sin embargo, la maldad se ha multiplicado y al hombre le cuesta tanto entender este principio de amor dejando de lado lo que más importa que es el vivir en paz primeramente con Dios y después con los hombres. Cuando logramos entender que lo primero es buscar las cosas de arriba donde está Cristo sentado se afirma en nuestra vida un cambio y nos gustaría vivir una vida en santidad.
Es importante recordar que Jesús desea lo mejor para nosotros, Él vino a darnos vida y vida en abundancia a fin de que todos procedamos al arrepentimiento, y que podamos ser personas que testifican verdaderamente su amor.
Seguir a Jesús nos hace fuerte
Cuando venimos a Jesucristo Él no nos reprocha que somos pecadores, al contrario, nos reconforta, nos da paz y restaura nuestras vidas a través de su perdón. Seguir a Jesús nos hace fuerte y llenos de su gran amor.
Encuentra en Dios ese amor que buscas y deja que Él sea quien te dirija en todo lo que haces, aunque pienses que no es posible porque son muchos los factores que te afectan, Dios siempre está dispuesto a bendecirnos, ayudarnos y a mejorar nuestra calidad de vida. Esto sucede porque nos ama tanto, porque nos creó, porque nos conoce, sabe de que tenemos necesidad. Quita de tu mente los obstáculos que te impiden acercarte a Dios y deja que sea Él moldeando tu vida.
¿Te cuesta avanzar?
Haz un análisis en tu vida acerca de tu relación con Dios y pregúntante: ¿qué cosas has hecho para avanzar? Si tu respuesta es nada, entonces es tiempo que dejes de procrastinar y utilices tu tiempo lo mejor que puedas (recuerda que el tiempo que pasa volando) cuando te des cuenta podrás medir los resultados y notarás que tienes una vida de intimidad con Dios y sin darte cuenta te costará menos luchar por tus sueños porque es Dios quien te guía.
Reconoce la Majestad de Dios en tu vida
Saber que Dios está en tu vida ya es ganancia, cuando es el Espíritu Santo es quien te guía no hay más para donde ver, Él es tu lámpara, tu lumbrera, quien hace de ti una mejor persona enfocada en reconocer la majestad y la grandeza de Dios. Deja que sea Dios en tu vida, reconoce su BELLEZA, AMOR, SOBERANÍA, MAJESTAD y todo lo bueno que viene de Él.
Dios te bendiga rica y poderosamente, no dejes que el mundo te atrape, corre a Dios, Él te está esperando con los brazos abiertos.