Descubre cómo amar a tus enemigos

¿Quieres descubrir cómo amar a tus enemigos? ¿Sabías que Dios nos llama a amar a nuestros enemigos? ¿Crees que es posible amar a quien te hace daño? ¿Alguna vez has perdonado a alguien que te ha hecho daño? Si quieres profundizar en este tema te invito a leer la cápsula divina de hoy. 💊

44  Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;

 Mateo 5:44 [RV60]

Mateo 5:44 es parte del Sermón del Monte, Jesús enseñaba un estilo de vida que va más allá de la justicia humana, se trata de una justicia divina, basada en el amor incondicional. A través de esta enseñanza Jesús nos invita a dar un paso que parece contrario a nuestra naturaleza, amar a quien nos hace daño. 

No se trata de soportar solamente, sino también de hacer el bien y orar por ellos. Esto no significa que apruebes el mal que te hacen, sino decidir conscientemente no responder con odio ni venganza. 

¿Por qué perdonar a los enemigos?

Porque este tipo de amor termina con el ciclo del odio. Este tipo de amor libera a cualquier persona del rencor, del veneno emocional y del deseo de venganza que destruye por dentro. Así que, si decides amar a tus enemigos y orar por quienes te persiguen, abres la puerta para que Dios actúe en su corazón y también en el tuyo. 

Dios no nos pide a amar a nuestros enemigos porque ellos lo merezcan, sino porque hemos sido amados así por Él.

Aún cuando éramos pecadores, enemigos de Dios por nuestras acciones, Cristo murió por nosotros. Al amar a nuestros enemigos nos parecemos a nuestro Padre celestial. Mateo 5:45

45  para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

 Mateo 5:45 [RV60]

Amar a los enemigos: más que un sentimiento

Este amor que Jesús menciona, se refiere al amor ágape que es el amor de Dios. Es un amor que busca el bien del otro sin esperar nada a cambio. Es un amor que no está basado en emociones, sino en acción y decisión. Entonces amar al enemigo significa:

✍🏻No alimentar el odio.

✍🏻No buscar venganza.

✍🏻Elegir actuar con compasión, incluso cuando la otra persona no lo merece.

Claro está, esto no significa que debes permitir abusos e injusticias, sino responder con sabiduría y con un corazón que no se contamina con el mismo mal que se nos ha hecho.

Bendecid a los que os maldicen

En este contexto, es decir bien sobre el que habla mal de ti. Tal vez pensarás que esto no es fácil de hacer, pero cuando permites que sea Dios que haga en ti, podrás hacerlo. De esta forma, se romperán las cadenas de maldiciones con palabras de vida.

¿Qué necesitas para hacerlo? Necesitas dominio propio, humildad y una confianza profunda en Dios que Él te defiende.

Haced el bien al que te aborrece

Pero, ¿cómo es posible haced el bien al que te aborrece? Esto va más allá de la indiferencia. Esto es hacer actos de bondad hacia quienes nos desprecian. ¿Por qué? Porque el bien desarma. El enemigo siempre espera tu reacción impulsiva, pero cuando haces el bien, muestras una fuerza mayor, que es la del Reino de Dios. 

Orad por los que os ultrajan y os persiguen

Si crees que no puedes amar a tus enemigos, la llave para hacerlo es orar por ellos, esta es la llave para sanar el alma. Cuando oras por tus enemigos no solo los pones en las manos de Dios, sino que libera el corazón del rencor. Además, dejas de ver al enemigo como una amenaza y lo empiezas a ver como un alma herida, necesitada de gracia, igual que tu.

Qué debes hacer para amar a tus enemigos

Si quieres ser libre y amar a tus enemigos, quiero decirte que no es con tus fuerzas, solamente con la ayuda de Dios reconociendo tus faltas. Luego, comienza identificando a quienes consideras tus enemigos o personas difíciles, después ora de forma genuina por ellos, aunque sea difícil, actúa con bondad, aunque sea en pequeños gestos. Y por último, no respondas al mal con mal, sino con bien. 

Si crees que esta enseñanza fue de ayuda para ti, te invito a compartir y comentar. 

¡Si amas a Dios, no será difícil amar a tus enemigos!